Fotos de comunión

Un momento especial, para siempre
Más que el recuerdo del traje o el peinado
¿Por qué hacer una sesión de fotos en la comunión?

Una sesión de comunión no solo es un recuerdo del traje o el peinado. Es una forma de congelar la esencia de lo que es ahora, antes de que cambie.

Quiero ayudarte a guardarlo, con fotos naturales, emotivas y llenas de luz. Como ellos.

Así de fácil es reservar tu sesión
1.
Elige tu fecha

Lo ideal es reservar al menos con 6 semanas de margen respecto al día de la Comunión. Así aseguramos tiempo para cambios o imprevistos.

2.
Reserva tu lugar

Solo necesitas dejar una señal para reservar tu fecha. A partir de ahí comenzamos a planear los detalles juntas.

3.
Preparación

Te enviaré mi guía con ideas de vestuario y resolveré cualquier duda que tengas. Cuanto más clara tengas tu idea, mejor podré adaptarla.

4.
El gran día

Tú solo ven con ilusión. Yo me encargo del resto.
Crearemos un reportaje bonito, real y lleno de emoción.

¿Dónde hacemos la sesión?
  • En exteriores: Campos, jardines o playas al atardecer. La naturaleza siempre aporta una luz especial y una atmósfera relajada.

  • En casa o en estudio: Si prefieres un entorno íntimo o más controlado, también podemos hacerlo. Lo importante es que se sienta cómodo.
¿Antes o después del gran día?

Podemos hacer la sesión unas semanas antes si deseas usar las fotos para el recordatorio, el libro de firmas o detalles del evento.
O, si lo prefieres, después. Sin prisas, sin estrés, con el traje ya estrenado y una actitud más relajada. ¡Tú eliges!